Pensamiento Willems®
Describir en pocas palabras lo que es la Pedagogía Willems® es todo un reto. En efecto, aunque los principales elementos del pensamiento de Edgar Willems son muy sencillos, su desarrollo permite abarcar todo el abanico de cuestiones relativas a la educación musical, desde el inicio de los primeros contactos con la música hasta su práctica instrumental a nivel profesional.
Los fundamentos de la pedagogía Willems®
Desde el punto de vista metodológico y pedagógico, éste es probablemente el elemento más característico de esta propuesta, que se viene probando y practicando desde 1945: todos los principios musicales introducidos en los primeros cursos deben seguir siendo pertinentes en la práctica profesional, y a fortiori en la práctica vocal e instrumental de los aficionados.
Esto implica una reflexión profunda sobre todos los elementos que componen la música: ritmo, melodía, armonía y sobre cómo introducirlos, practicarlos y nombrarlos.
Correlación musical
y la naturaleza humana
Edgar Willems destacó la posible correlación entre esta naturaleza de la música y la naturaleza humana, que a su vez se compone de tres elementos: un cuerpo físico, animado por una vida fisiológica, un alma sensible, para la vida emocional, y una cabeza pensante, para la vida mental.
La educación musical toca estas tres dimensiones del ser humano:
El cuerpo
La vida fisiológica se ve afectada por el sonido. La vida física está ligada al ritmo y es necesaria para la acción rítmica.
Sensibilidad
La vida emocional está tocada por la melodía y se expresa a través de ella.
Inteligencia
Una dimensión mental intuitiva o consciente es necesaria para la receptividad y la práctica de la armonía.
Esta síntesis músico-humana demuestra que la música no es externa al hombre, sino la expresión artística de su naturaleza profunda.
A partir de ahí, no se trata de inculcar nociones musicales a alumnos más o menos receptivos y más o menos «dotados». Dado que la música es una emanación del ser humano, se trata sobre todo de revelar a estos aprendices-músicos lo que ya llevan dentro, estimulando su cuerpo, su corazón y su cabeza a través de la música, buscando un equilibrio en la realización de estas tres dimensiones: una cabeza pensante en un cuerpo activo disponible para la expresión sensible de lo mejor de uno mismo, lo que podría ser una definición de un arte completo.
La música como expresión profunda del ser humano.
Aprendizaje musical: un viaje lingüístico
La otra gran característica de la propuesta pedagógica de Edgar Willems es su metodología: considerando que la música es un lenguaje, su aprendizaje debe seguir las mismas etapas que el aprendizaje de una lengua materna, es decir, impregnación, experimentación, conciencia, creación.
Las claves de la Pedagogía Willems®
Edgar Willems trabajó para describir las etapas psicológicas que atraviesa el niño músico poco a poco, a veces de forma espontánea, según su contexto educativo o familiar, más a menudo bajo la guía de un maestro. La progresión se dividirá en 4 grados, concretados con Jacques Chapuis en principios precisos de la iniciación musical a la formación musical (teoría musical) y la formación instrumental.
Por ello, la Federación ha desarrollado diversos ciclos que permiten a los alumnos apropiarse e integrar el pensamiento de Willems en sus actividades.